Día 15

Info general del coronavirus:

  • 5690 muertos y 72248 contagiados en España.
  • A partir del lunes sólo estarán activos los servicios esenciales.
  • Emmanuel Macron, presidente de Francia respondió sobre el bloqueo de Holanda y Alemania a apoyar un plan de ayudas de la UE para afrontar las repercusiones económicas del coronavirus: “Algunos países actúan como si Italia o España fueran responsables de ello y son, por el contrario, las primeras víctimas y este virus no perdona a nadie. Lo que me preocupa es la enfermedad de ‘cada uno piense en sí mismo’ y, si no estamos unidos, Italia, España y otros países podrían decir con razón a sus socios europeos: ¡dónde estabas mientras estábamos en el frente? No quiero una Europa egoísta y dividida
  • Hoy se ha publicado en el BOE la prórroga del estado de alarma hasta las 0:00 h. del 12 de abril
  • El ministerio de salud de China ha informado que no se ha registrado ningún caso local de contagio por coronavirus, ni siquiera en Wuhan (epicentro del brote)
  • Esta madrugada ha llegado al aeropuerto Madrid-Barajas 1,2 millones de mascarillas compradas por el Ministerio de Transportes.>
  • La empresa china cambiará los 640.000 test rápidos defectuosos que vendió a Sanidad por otro modelo.

Y ahora, mis pensamientos en estos momentos:

En España, la última vez que teníamos coartada la libertad de movimiento fue en la época del “tito Paco”. En ese momento había personas que lo sufrían y personas que se aprovechaban de la situación. En esa época, el currante era el más sacrificado económica y socialmente. Estaban los que decidían a quién, cuándo y cuánto darle a unos pocos. Existía una represión por pensamientos, ideologías y posición. Ahora nos encontramos en un estado similar, en que el currito sólo posee una vivienda pequeñita (el que pueda) donde se tiene que esconder con su familia, sin poder comprar muchos productos indispensables por carecer de medios, sin poder salir a trabajar libremente por el doble temor de la enfermedad y que si lo paran sin tener la documentación correcta le puede costar más caro que el dinero que obtiene con su trabajo. Prisioneros de la economía, prisioneros de la pandemia, prisioneros de las circunstancias que han derivado su vida en un laberinto de donde es muy difícil salir. Familia y trabajo, trabajo y familia. Y cuando esa misma persona trabaja en algo “no esencial” y le obligan a encerrarse en su cubículo con esa familia que antes no veía tanto, puede tener dos vertientes totalmente contrapuestas. Una sería la de volver a revivir un segundo enamoramiento familiar y otra la de sentirse encarcelado y privado de “su libertad”. ¡Qué palabra más maravillosa… si fuese verdad!  ¿Libertad de qué? ¿De salir y entrar cuantas veces quieras para seguir haciendo lo mismo día tras día? ¿De soportar la presión social que te dice reiteradamente que nunca alcanzarás tus metas? ¿De llevar esa “normalidad” que tenías?

Si la situación dictatorial anterior enseñó a muchos que podíamos aspirar a un mundo de libertad, que esta situación actual nos enseñe a realizarlo de forma efectiva, que consigamos crear un mundo mejor, pero sin los errores de antes, donde conseguimos lograr un mundo mejor para unos pocos, donde los curritos de a pié no pintábamos nada salvo el servir de ganado obrero para los que ostentaban el poder. Esto debe servirnos para ser conscientes que todos somos iguales, o lo deberíamos ser, ya que esta enfermedad ha afectado a ricos y pobres por igual, aunque el tratamiento recibido para luchar contra ella no haya sido el mismo. Muchos son los personajes famosos que han sido infectados con este virus, y con ello han conseguido que se piense en esta lucha como algo de todos, y no solo una forma de contagio ciudadano que los mantiene a salvo, pero incluso así se sigue pensando que lo de Italia es diferente a lo de España y lo de España es diferente a lo de Alemania ¿No éramos ciudadanos europeos todos? ¿No vivíamos en la casa común europea? Me temo que cuando todo esto pase, el sentimiento de territorialidad se fortalecerá en la misma medida que descenderá el sentimiento europeísta.

Mi juventud fue en la década de los 80 y había quien decía que la época hippy fue fantástica, pero no pensaban que se estaban refiriendo a lo ocurrido en EEUU, ya que en España se trataba de una época en que daba sus últimos coletazos la dictadura, y por lo tanto nunca existió ese tiempo en nuestro país. Estaba bien que pensáramos en el Tío Sam como ejemplo de libertades por la ausencia de las mismas en nuestro propio territorio, pero ahora mismo, y con “la que tenemos encima”, es un mal ejemplo pensar que debemos ser iguales a un país donde no existe la Seguridad Social, en el que se salvará de esta pandemia el que posea recursos económicos para poder afrontarla, en el que su presidente achaca todos sus males a la ausencia de un muro de separación con sus vecinos del sur, en que dicen que la economía está por encima de la salud. Pienso que no debemos tener ningún referente a nivel mundial: Alemania y Holanda niegan subvenciones por la pandemia, en Inglaterra han tenido que morir muchas personas para que comiencen a tomar medidas, en México y Brasil dicen que se debe fortalecer la economía del país saliendo a los restaurantes y haciendo vida “normal”, los chinos no informaron de este desastre hasta que veían que se les escapaba de las manos, Italia actuó tarde y no consigue detener esta sangría. No debemos referenciarnos con ninguna otra nación, y asimilar lo de “Spain is diferent” tanto a nivel mundial como nacional. Dejémonos de  cosas como: Cataluña y el País Vasco no tiene el apoyo del España y por eso son de las más perjudicadas, las Castillas no tienen medios porque todo se lo dan a Cataluña o al País Vasco, Andalucía está más afectada por los madrileños que vienen a sus segunda residencia, los madrileños son los que más enfermos tienen porque van allí de todas las comunidades, Valencia y Mallorca están olvidadas por el Gobierno de España, etc. Rememos todos en la misma dirección, este virus no discrimina por razones de territorialidad, y si cada región es diferente lo debemos tratar como un signo de personalidad propia, pero no como discriminatorio hacia otro territorio con otra idiosincrasia distinta. Todos los territorios de España son diferentes y entre todos conforman esta nación compuesta de ibéricos y peninsulares, que conseguirán salir airosos de cuantos desafíos se nos presenten, ya sean en forma de virus clínico o de mentalidades retrógradas.

Y ahora distraigámonos con muchas ideas de bricolaje, que son ideales para estos días:

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